Con el inicio de la temporada estival, Asturias confirma el buen estado de sus aguas de baño: ocho de cada diez playas han obtenido la máxima calificación sanitaria, según los análisis realizados por el Laboratorio de Salud Pública durante las últimas cuatro temporadas (2021-2024). En concreto, el 84,93% de las zonas evaluadas presentan una calidad excelente, mientras que un 9,5% alcanza la calificación de buena.
El dispositivo de vigilancia, que se mantiene cada verano entre junio y septiembre, analiza semanalmente 73 puntos de muestreo distribuidos en 63 arenales de 19 concejos, para detectar cualquier posible alteración en la calidad del agua. Esta labor es competencia de la Consejería de Salud, que remite los resultados al sistema nacional de aguas de baño Náyade, del Ministerio de Sanidad.
La calificación sanitaria de cada playa se determina con base en los resultados acumulados durante las últimas temporadas, siguiendo una normativa común a todos los países de la Unión Europea. Este sistema homogéneo permite realizar comparaciones a nivel continental.
Desde el Principado se recuerda que la calidad del agua puede verse alterada de forma puntual por fenómenos meteorológicos adversos o vertidos esporádicos, aunque la tendencia general en la comunidad sigue siendo altamente favorable.
Por su parte, las autoridades locales son responsables de mantener la limpieza de los arenales, informar sobre el estado del agua y prevenir posibles focos de contaminación. Los análisis más recientes y la situación de cada playa se pueden consultar en el siguiente enlace oficial:
👉 https://www.asturias.es/Asturias/playas/index.htm