El pabellón institucional del Gobierno de Asturias en la Feria Internacional de Muestras de Asturias (Fidma) ha cerrado sus puertas este domingo con un balance histórico: más de 100.000 personas han visitado el espacio dedicado a la cultura sidrera, convirtiendo esta edición en la más concurrida desde que se tienen registros.
Durante su visita en la jornada de clausura, la consejera de Cultura, Política Llingüística y Deporte, Vanessa Gutiérrez, destacó que el estand ha alcanzado los 100.169 visitantes, superando ampliamente los datos de 2024 (87.640). El 13 de agosto se registró el récord diario, con 11.950 personas en una sola jornada.
“El éxito rotundo del estand en esta edición muestra la extraordinaria identificación de la ciudadanía con la cultura sidrera asturiana, reconocida por la UNESCO como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad”, señaló Gutiérrez.
Bajo el lema «Asturies ye sidrera. Lo nuestro ye mundial», el pabellón ha ofrecido una experiencia inmersiva en torno al universo de la sidra: desde la pumarada hasta el escanciáu. Más de 104 actividades han dinamizado el espacio, con talleres gastronómicos y artísticos, experiencias virtuales, cantares de chigre, cuentacuentos, degustaciones y demostraciones de escanciado, entre otras propuestas.
El perfil de visitantes ha sido mayoritariamente asturiano (85,07%), aunque también acudieron personas de otras partes de España (13,14%) e incluso del extranjero (1,79%). La programación logró aforos completos en la mayoría de las actividades, demostrando una alta participación intergeneracional.
Además, el espacio acogió 26 visitas institucionales oficiales y 27 actos de presentación y reuniones de trabajo, consolidándose como referente de dinamización cultural, institucional e industrial.
Uno de los hitos de esta edición fue la presentación del Programa plurianual de acciones para la preservación y promoción de la cultura sidrera asturiana, el pasado 12 de agosto, una estrategia integral con 115 medidas agrupadas en cinco grandes ejes para convertir la cultura sidrera en un motor de desarrollo territorial, educativo, turístico y económico.
“Esta edición de la Fidma constituye un hito. Hemos batido récords, pero sobre todo hemos reforzado el vínculo entre Asturias y su patrimonio”, concluyó la consejera.